Gregorio XIII (1572-1585) |
El calendario juliano, nombre en honor a Julio César, adoptado en el Imperio romano el año 46 a. C, consideraba que cada año tenía una duración de 365,25 días, en lugar de los 365,2421 reales, hecho que produjo a lo largo de los siglos un desfase de 10 días de retraso. El papa Gregorio XIII modificó el calendario en 1582, sucediendo al día 4 de octubre de 1582 (juliano) el 15 de octubre de 1582 (gregoriano), desapareciendo esos días de más que ya se habían tenido en cuenta a lo largo de los siglos por la mayor duración de los años según el calendario juliano.